Si eres un amante de los gatos, sabes que su cariño no siempre es tan obvio como el de un perro. Mientras que los perros saltan y mueven la cola, los gatos tienen un lenguaje de amor más sutil y misterioso. A menudo, su afecto se esconde en pequeños gestos que, si no los conoces, podrías pasar por alto.
Comprender el comportamiento felino es la clave para fortalecer el vínculo con tu mascota y apreciar la profundidad de su amor.
Este es uno de los comportamientos más conocidos. Cuando tu gato presiona sus patas delanteras de forma rítmica sobre tu regazo o en una manta, está "amasando". Este gesto se remonta a su infancia, cuando los gatitos masajean a su madre para estimular la leche. En la edad adulta, es una señal de que se sienten completamente seguros, cómodos y felices a tu lado.
Cuando tu gato frota su cabeza, mejillas o cuerpo contra ti, está dejando su olor a través de las glándulas que tiene en la cara y el cuerpo. Al hacerlo, te está marcando como parte de su familia o "grupo". Este es un gesto de extrema confianza y un claro indicio de que te considera alguien especial.
Este gesto es conocido como "el beso de gato". Si tu gato te mira, entrecierra sus ojos y parpadea lentamente, está mostrándote que se siente relajado y seguro en tu presencia. Puedes devolverle este "beso" parpadeando lentamente tú también, lo que fortalecerá aún más su vínculo.
La cola de un gato es un indicador muy preciso de su estado de ánimo. Si tu felino se acerca a ti con la cola completamente erguida y con una ligera curvatura en la punta (como un signo de interrogación), es una señal de que está feliz de verte y se siente amigable.
Cuando un gato se tumba boca arriba y te muestra su vientre, te está demostrando la máxima confianza. En esta posición, es vulnerable, por lo que este gesto es una señal inequívoca de que se siente totalmente seguro y protegido contigo. No siempre significa que quiera que le frotes la barriga, así que ten cuidado con tus manos.
Aunque un gato puede ronronear por muchas razones (como estrés o dolor), el ronroneo suave y constante que emite cuando lo acaricias o duerme sobre ti es una clara señal de placer y felicidad. Es su manera de decir que está a gusto contigo y en su entorno.
Los "mordiscos de amor" son pequeños y suaves mordiscos que un gato te da en los dedos o la mano. A menudo, se dan durante una sesión de caricias y no duelen. Es su forma de mostrar afecto, similar a como lo harían con otros gatos en su grupo social.
Si tu gato te trae un juguete (o algo más inesperado si es un gato de exterior), te está compartiendo un "trofeo". Este comportamiento demuestra que te ve como parte de su familia y te está cuidando, compartiendo lo que considera valioso contigo.
Si tu gato te sigue de una habitación a otra, te espera en la puerta del baño o se acuesta cerca de ti mientras trabajas, no es por curiosidad. Es una muestra de que disfruta de tu compañía y quiere estar cerca de ti, reforzando su vínculo emocional.
Los gatos son más vulnerables mientras duermen. Si tu felino elige dormir sobre tu regazo, en tu cama o acurrucado a tu lado, es una señal de que te ve como un lugar seguro. Es una de las mayores muestras de confianza que te puede dar.
Al final del día, el amor de un gato es un regalo único y sutil. Entender estas señales te permitirá apreciar aún más la conexión especial que tienes con tu mascota. Si quieres seguir cuidando de tu felino de la mejor manera, recuerda que el sustituto de arena para gatos ideal debe estar a la altura de su cariño.
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