Los pellets para gato son pequeños cilindros comprimidos hechos de residuos vegetales, como pino o cáscara de nuez, y se utilizan como arena natural para gatos, absorbiendo la orina de forma eficiente.
Entre sus beneficios destacan:
Los pellets para gato funcionan diferente a la arena aglomerante. Al absorber la orina, se expanden y se desintegran en aserrín, lo cual requiere una bandeja que permita separar los residuos sin complicaciones. Elegir el arenero adecuado mejora la eficiencia del sustrato, facilita la limpieza y prolonga su durabilidad.
Este formato consta de una bandeja superior perforada sobre otra sólida. Permite que el aserrín generado por los pellets de madera para gatos caiga a la bandeja inferior, separándose de los pellets aún secos. Sus ventajas son:
Sí, pero requieren una pala especial o colador de orificios grandes para separar el aserrín de la arena de madera para gatos limpia. Aunque menos prácticos, siguen siendo funcionales con algunos ajustes:
La arena para gatos en pellets necesita oxigenación para evitar condensación. Las bandejas profundas o cerradas pueden:
En hogares con varios felinos, lo ideal es usar múltiples areneros de bandeja doble o combinar uno doble con otros convencionales. Esto evita competencia territorial y facilita la transición al nuevo sustrato.
Los modelos con rejilla o doble fondo son los más compatibles con estas alternativas a la arena de gato convencional, ya que simplifican la limpieza y mejoran la higiene. Acompañado de una buena rutina de mantenimiento y un producto natural como los pellets, este sistema representa un cambio inteligente para ti y tu mascota.
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